Las TV autonómicas ya pueden pasar a ser gestionadas desde el sector privado

El Pleno del Senado aprobó ayer la reforma de la Ley General de Comunicación Audiovisual con la que se flexibiliza la gestión de las cadenas de televisión públicas autonómicas y abre la puerta a la entrada de empresas privadas en estos canales. La reforma se aprobó con 157 votos a favor del PP y de UPN, 86 votos en contra por parte del resto de grupos y la abstención de 5 senadores.

Esta Ley modifica la aprobada en 2010 por el Gobierno anterior y permitirá a los gobiernos autonómicos decidir sobre el futuro de sus televisiones autonómicas, es decir, si siguen manteniéndolas o no, o si bien prefieren prestarlas o encargar su gestión a una empresa privada. En cualquier caso, si deciden hacerse cargo, el gobierno central no les dejará tener déficit ya que “no se permitirán desequilibrios en los presupuestos”. 

Hasta el momento, la Comunidad Valenciana, la Comunidad de Madrid y Castilla la Mancha han expresado su voluntad de pasar a manos privadas la gestión de sus televisiones autonómicas.

La reforma presta especial atención a los contenidos

La presentación de una enmienda, a propuesta del PSOE y acordada por todos los grupos, cambia de nuevo el artículo 7.2 de la Ley Audiovisual. En él se establece que “está prohibida la emisión de contenidos audiovisuales que puedan perjudicar seriamente el desarrollo físico, mental o moral de los menores, y en particular, la de aquellos  programas que incluyan escenas de pornografía, maltrato, violencia de género o violencia gratuita.”     

COMRàdio replantea plantilla y programación

COMRàdio, perteneciente a la Diputación de Barcelona, está viviendo una época de cambios profundos. La última noticia que hemos conocido es el despido de sus caras más conocidas, las cuáles encabezaban hasta ahora los programas más populares de la emisora. Sergi Mas, al frente de los espacios ‘El telèfon de Mas’ y ‘Què has dinat’ fue quien dio a conocer la noticia a través de la red social Twitter. Además de él, otros profesionales que ya no estarán en septiembre son Jordi Duran (‘El dia a la COM’), Olga Vallejo (‘Extraradi’), Ramon Company (‘Tots per tots’) y Ramon Miravitllas (‘La nit’). Se trata de programas que estaban contratados a productoras externas. 

Desde la dirección de la emisora se ha expresado la voluntad de dirigir su modelo radiofónico hacia las radios locales asociadas. En este sentido, se prevé que la parrilla de COMRàdio va a contener cambios a partir de la nueva temporada que empezará en septiembre.

El malestar entre los trabajadores es notable ya que temen que después de esta decisión se haga efectiva la fusión entre la emisora, la Agència Catalana de Notícies (ACN) y la Xarxa Audiovisual Local (XAL). Parece ser que el objetivo de los responsables de comunicación de la Diputación de Barcelona es la creación de una gran plataforma mediática que concentre radio, televisión y prensa. 

Vigilada con lupa la fusión entre Antena3 y La Sexta

La Comisión Nacional de Competencia (CNC) está supervisando al detalle el proceso de fusión entre Antena3 y La Sexta ya que, después de la unión protagonizada por Telecinco y Cuatro hace ya un tiempo, se dibujaría un panorama con 2 grandes grupos audiovisuales que controlarían el 85% del mercado publicitario.

Por su parte, Antena3 está negociando para conseguir unas condiciones parecidas a las que en su día Telecinco obtuvo para poder comprar Cuatro. La diferencia en este proceso es que Antena3 opera bajo el modelo de pauta única, es decir, que la cadena emite los mismos anuncios simultáneamente en todos sus canales. Según la CNC, con la incorporación de La Sexta potenciaría el control de la publicidad.

Además, la CNC analiza el hecho de que la existencia de dos grandes grupos audiovisuales podría favorecer que ambos actuasen de forma coordinada en el mercado de la publicidad televisiva.

Mediaset al incumplir las condiciones que se le impusieron para comprar Cuatro tiene un expediente sancionador abierto y este hecho ha contribuido a dificultar el proceso de Antena3 y La Sexta. Una de las condiciones que se le impuso a Telecinco era la imposibilidad de vender en un mismo paquete comercial la publicidad de sus dos canales con mayor audiencia.

Han transcurrido ya siete meses desde el anuncio de la fusión entre Antena3 y LaSexta y hasta finales de julio no se espera ninguna resolución de la situación.